Un repaso de los diferentes tipos de vacunas

Las nuevas vacunas basadas en ARN mensajero (mRNA) podrían ser un cambio de paradigma en la historia de la humanidad. Más fáciles y rápidas de producir. Con un menor costo de producción y potencialmente más efectivas.

Los métodos tradicionales se basan en utilizar virus inactivos o virus activos atenuados. El virus inactivo es muy seguro, pero produce una baja respuesta inmune por lo que necesita refuerzos. El virus atenuado produce una excelente respuesta inmunitaria, pero existen riesgos de desarrollar la enfermedad. Varias vacunas contra COVID-19 de origen chino se basan en la metodología de virus inactivados como por ejemplo la Sinovac.

Un método más moderno y que ha probado ser exitoso es el llamado vector viral. Este método utiliza un virus debilitado (típicamente un adenovirus de resfrío común) genéticamente modificado y al que se le agrega un antígeno del virus del que se quiere proteger. Esto produce una fuerte respuesta inmunitaria por lo que normalmente una sola dosis es suficiente. Sin embargo, la eficiencia de este método puede ser baja si la persona tiene niveles existentes de protección inmunitaria contra el virus vector. En otras palabras, el sistema inmune desarrolla una respuesta inmunitaria al virus vector y no al antígeno que se encuentra dentro del virus. La vacuna se Oxford/AstraZeneca, la Sputnik V de Gamaleya, la Cansino china y la de Johnson & Johnson son ejemplos de este método.

Otro método también moderno es el que utiliza proteínas del virus como antígeno. Han demostrado ser muy seguras (como la vacuna de la Hepatitis B) y suelen ser muy útiles en personas con sistema inmunológico debilitado. Sin embargo, pueden estimular una respuesta inmunitaria insuficiente por lo que es necesario varías dosis. Además, requieren mucha investigación para determinar que proteínas son las que mejor desarrollan la respuesta inmune.

Finalmente, los nuevos tipos de vacunas que se están desarrollando ahora son las basadas en ADN o ARN. Utilizan fragmentos del material genético del virus fabricado en el laboratorio. Estos fragmentos codifican alguna parte del virus, típicamente una proteína. El organismo, genera los antígenos a partir del ARN. Las vacunas contra el COVID-19 de Pfizer y Moderna son las primeras en desarrollarse usando este ARN mensajero.Este método tiene la ventaja de ser más fácil y rápido de producir y reducirán drásticamente los costos. Es posible que generen la respuesta inmune baja por lo que es necesario refuerzos, pero su efectividad es mayor que la del vector viral.